EL FILÓSOFO, I



A Alain Masson, 
por su sabiduría
y su amor al ser humano.






 — El filósofo debe acudir gozoso a la muerte–, tranquiliza Sócrates a todos los que han llegado de Delos para acompañarlo en su última noche.
— Maestro —pregunta Fedón, porque le aprecia por encima de todos los hombres–, si la muerte es tan deseable ¿por qué no deberíamos buscarla también cada uno de nosotros?
— ¿No estaríamos usurpando su labor a los dioses si eso hiciéramos? La cicuta que van a traerme no la beberé para buscar la muerte, sino para que se cumpla la sentencia que el pueblo de Atenas ha dictado contra mí.
— Entonces –añade Critón–, ¿cómo puedes explicar tu serenidad ante ella?
— Porque no he desarrollado ese instinto que se apega a la vida.






EL FILÓSOFO, I, por Mª Pilar Álvarez Novalvos
Licencia Creative Commons

Comentarios

  1. un texto muy filosófico, Pilar. Da qué pensar. Gracias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me atrevería a decir que conocí a alguien que partió con esa increíble aceptación de la muerte, el gran amigo a quien dedico el poema y del que aprendí infinito.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares